miércoles, 27 de octubre de 2010

Diego Luna: "Dirigir es un viaje más profundo y revelador que actuar"

El actor mexicano Diego Luna, que saltó a la fama con Y tú mamá también, se ha pasado a la dirección con Abel, la película que presenta estos días en Londres y que le ha hecho sentir que "dirigir es una experiencia más profunda y reveladora que la actuación".

Aunque no cierra las puertas a la interpretación, para Diego Luna ha resultado "maravilloso" conseguir "que una idea se convierta en película, que esa película conecte con el público y que viaje".

Así lo explica en una entrevista con motivo de la presentación de su última cinta en el Festival de Internacional de Cine de Londres (BFI).



La cita de Abel con Londres era muy importante para Luna, porque "la mitad de la historia es británica". Su madre, que falleció cuando él era pequeño, nació en el Reino Unido y el
filme "es un homenaje a ella, a la relación de las madres con sus hijos".

Aunque la película ya se había presentado fuera de México, en escenarios como Sundance (EEUU), Luna reconoce que estaba nervioso, "sobre todo el día del primer pase", cuando parte de su familia inglesa acudió a la proyección.

Cuando Luna comenzó a trabajar en el proyecto partió de la idea de un "Hamlet moderno, un ejercicio de imaginación sobre qué pasaría si ese Hamlet tuviera que reinar siendo sólo un niño de 9 años".


Ese niño al que le toca reinar con sólo 9 años acabó siendo Abel, un pequeño que, después de que el padre abandone a la familia, tiene que ser ingresado en un centro psiquiátrico porque deja de hablar.

Cuando regresa a casa después de haber pasado dos años internado, el pequeño asume el papel del padre ausente y, para sorpresa de toda la familia, se encarga del bricolaje, regaña a los hermanos como si fueran sus hijos y trata a la madre como a una esposa.

"Para esta historia, que trata de un niño y de su despertar, buscábamos un niño que nunca hubiera actuado y encontramos a Christopher Ruiz-Esparza. Queríamos que fuera así para que no se perdiera la magia, para que se borrara la línea entre realidad y ficción que tan marcada tenemos los actores", explica Luna.


De esta manera, Luna consiguió que durante la película "el niño transitara por un mundo casi real, para poder capturar el brillo en sus ojos. Cuando actúas, la inocencia se va perdiendo, y eso es algo que solo pasa una vez".


El resultado es una historia con un "difícil" equilibrio entre el drama y el humor que Luna tuvo que "reescribir" en la fase de edición, seleccionando las imágenes para que "algo que de partida puede resulta divertido, un niño comportándose como un adulto, nos hiciera ponernos en el lugar de una madre, que no estaba disfrutando en absoluto con esa situación".


Para Luna, el cine es una "importantísima herramienta de cambio, un espejo de la sociedad, un vehículo para contar historias y encontrarnos en las historias de otros", por lo que espera seguir trabajando como director para seguir "conectándose" con el público.


El actor y director, que ya busca nuevos proyectos, se siente "ansioso" por despedirse de Abel, algo que hará en el Festival de Cine de Los Ángeles (EEUU), para poder dedicarse a su familia.

Mientras tanto, aprovecha el tiempo que pasa fuera de casa para enriquecerse con otros trabajos, como la nueva película de su "amigo" Alejandro González Iñárritu, Biutiful, que representará a México en los Oscars y que se proyecta también estos días en el marco del BFI.

"Salí afectado, pega profundo, pero es una película muy poderosa hecha por gente muy querida", dice Luna, que se niega a hacer más valoraciones porque no había podido aún comentar sus impresiones con sus amigos y no quería que éstos se enteraran por la prensa.

martes, 26 de octubre de 2010

Bryan Ferry recupera la esencia de Roxy Music en su nuevo álbum, "Olympia"

El cantante británico Bryan Ferry presentó hoy en Londres su último disco, Olympia, un álbum con ocho nuevas canciones y dos versiones en el que ha recuperado los ritmos ochenteros que le lanzaron a la fama como cantante de los legendarios Roxy Music.

Ferry, el hombre que en los setenta y ochenta puso su sello inconfundible a emblemáticas canciones del glam rock como More than this, ha cumplido ya los 65, peina canas y reconoce que le cuesta más componer que cuando era joven. Sin embargo, al verle actuar en directo, presentando sus nuevas canciones, cualquiera diría que el tiempo ha pasado de largo por su puesta en escena y por su voz.

Una bola de discoteca, telón plateado al fondo y bailarinas ataviadas con americanas con hombreras contribuyeron a crear una atmósfera propicia para un concierto que comenzó con You can dance, el primer sencillo de un álbum que ya está en las tiendas de discos.

Melodías pegadizas, ritmos electrónicos y la teatral puesta en escena de Ferry trasladaron al escenario la esencia de Roxy Music, el grupo que durante dos décadas impresionó con su vanguardista visión de la música pop.

No en vano, para la preparación del disco, el cantante ha contado con la colaboración de sus antiguos compañeros de banda, Phil Manzanera, Andy Mackay y Brian Eno, que no trabajaban juntos en un álbum de estudio desde 1973.

Los ritmos disco de Shameless y la guitarra eléctrica de Song to the Siren, una versión de la canción compuesta por Tim Buckley a finales de los 60, prepararon al público para lo que estaba por llegar: Let's Stick together, un clásico de la carrera en solitario de Ferry que consiguió con este tema que la Galería Philip de Pury en la que se presentó el álbum se convirtiera en una auténtica pista de baile.

Kate Moss es Olympia. Bryan Ferry.

El cuadro de Édouard Manet "Olympia" (1863), en el que una joven aparece desnuda recibiendo flores de su sirvienta, le sirvió a Ferry como fuente de inspiración para crear a su Olympia particular en forma de música.

Para trasladar al disco todo el glamour y el erotismo de esta imagen, el cantante inglés eligió como portada del álbum a la modelo británica Kate Moss, a la que considera "la femme fatal de la época actual", según explica el artista en su página web.

Un ensayo que aborda las connotaciones del provocativo cuadro de Manet escrito por el novelista Michael Bracewell se ha incluido en la edición de lujo de Olympia, que cuenta además con un libreto de 40 páginas con las instantáneas realizadas por el fotógrafo Adam Whitehead para la ocasión con Kate Moss como musa.

Las fotografías, expuestas también en la galería donde tuvo lugar el concierto, componen una serie de diez instantáneas, una por cada canción del disco, que se podrán visitar hasta el próximo 3 de noviembre.

Los Scissor Sisters, Groove Armada, David Gilmour (guitarrista de Pink Floyd), Jonny Greenwood (Radiohead), Nile Rogers (Chic), Mani (ex bajista de Stone Roses), Marcus Miller y Flea (Red Hot Chilli Peppers) son otros de los artistas que han trabajado codo con codo con Ferry en algunas de las canciones de un álbum con el que el cantante busca repetir el éxito de Dylanesque que en 2007 alcanzó el número cinco en las listas británicas con versiones de Bob Dylan.

lunes, 25 de octubre de 2010

"Chicharito" pone tercero al Manchester United con un doblete decisivo

El joven delantero mexicano Javier Hernández "Chicharito" ha demostrado que será un importante puntal del juego del Manchester United esta temporada después de conseguir un doblete frente al Stoke City que colocó a los "Diablo Rojos" en el tercer puesto de la Premier League.

Con sólo 22 años, el pasado 1 de julio Chicharito se convirtió en la exportación más grande del fútbol mexicano, con un traspaso de poco más de ocho millones de euros, y en el primer jugador de esa nacionalidad en fichar por el United.

El joven llegó a Old Trafford este verano procedente del Chivas de Guadalajara, donde su habilidad para tocar la pelota en espacios cortos y su capacidad para rematar de cabeza le convirtieron pronto en una pieza fundamental del equipo y en objeto de atención de los clubes del otro lado del Atlántico.

Su actuación en el Mundial de Sudáfrica, donde marcó dos tantos para la selección de Javier Aguirre, confirmó que su velocidad en las jugadas largas daría grandes satisfacciones al Manchester, donde Chicharito ya ha marcado cinco tantos desde su debut frente al Chelsea el pasado 8 de agosto.

El propio Alex Ferguson, que entrena al Manchester United desde hace 24 años, reconoció la importancia de los goles del mexicano, no sólo para la victoria del domingo, sino para mantener las posibilidades del conjunto de cara al resto de la temporada.

"Cuando el Stoke se adelantó en el marcador me dije a mí mismo 'va a ser uno de esos años', pero entonces marcó Chicharito", comentó Ferguson en una rueda de prensa posterior al partido que el delantero consiguió reconducir con un tanto de cabeza que puso el 1-1 en el marcador de Old Trafford.

Ferguson destacó el "increíble entusiasmo" de los aficionados tras este tanto, "que tan importante era", y la "fantástica" reacción del resto de jugadores que mantuvieron la presión contra el Stoke hasta el final del partido.

Cuatro minutos antes de que acabara el encuentro, Chicharito completó su doblete y la remontada con un tanto que llenó de alegría el llamado "Teatro de los Sueños".

Ferguson ya había destacado en otras ocasiones la capacidad de entrega del mexicano en los entrenamientos y lo rápido que se había integrado con el vestuario gracias a que tiene un nivel de inglés bastante aceptable.

Sin embargo, Chicharito se mantiene humilde, con los pies en la tierra. Reconoce que el gol que marcó de cabeza, que el técnico escocés ha descrito como "uno de los que pasan a la historia", era "bueno", pero afirmó que "lo más importante es el esfuerzo de todo el equipo". "No hay héroes", concluyó.

La prensa británica habla ya del "Mex Factor", un juego de palabras ideado por el tabloide The Sun para destacar el "Factor X" del mexicano, y todos los periódicos ingleses coinciden en que los dos tantos de Javier Hernández son la respuesta perfecta a las declaraciones del internacional inglés Wayne Rooney, quien recientemente había afirmado que los últimos fichajes del United no estaban a la altura de las aspiraciones del club.

viernes, 22 de octubre de 2010

El director de "300" salta a la animación con "Ga'Hoole, la leyenda de los guardianes"

Animación, 3-D, búhos guerreros y una historia de aventuras son los ingredientes de Ga'Hoole, la leyenda de los guardianes, la primera incursión del director de 300, Zack Snyder, en el cine de animación para toda la familia.

El director que sorprendió al público con las batallas a cámara lenta y la estética cómic de 300, la adaptación al cine de la novela gráfica de Frank Miller sobre la batalla de las Termópilas, firma ahora la historia de Soren, una joven lechuza que sueña con formar parte de los guardianes de Ga'Hoole.

Soren conoce la existencia de este grupo de guerreros alados, que arriesgaron sus vidas por salvar a todas las lechuzas, a través de las historias de su padre y, aunque nunca los ha visto con sus propios ojos, cree firmemente en su existencia.

Mientras fantasea con unirse a sus héroes, el hermano mayor de Soren, Kluud, se burla de él y hace gala de unos celos que harán que las dos jóvenes lechuzas acaben en las garras de los Puros, los malos de una historia basada en la saga literaria de la escritora estadounidense Kathryn Lasky Los guardianes de Ga'Hoole.

El afán de superación, la lealtad a la familia y la importancia de tener sueños para poder hacerlos realidad son algunos de los mensajes de esta película, en la que, sin embargo, no faltan escenas de acción e imágenes violentas.



En la presentación de la cinta en Londres, Snyder comentó que las escenas que se relatan en el libro "son todavía más oscuras" y que se suprimieron para que el argumento siguiera siendo para toda la familia.


Para Snyder, quien se inspiró en películas de su infancia de las sagas Indiana Jones y Star Wars, las escenas de acción "eran necesarias para conseguir una historia de aventuras en la que los niños pudieran creer".

El cineasta reconoció que la perspectiva de trabajar por primera vez en 3-D y además en una cinta de animación le preocupaba un poco porque temía que su forma de dirigir se viera "condicionada" por estas premisas.

"Conseguimos llegar a un término medio. Los animadores están acostumbrados a que en las películas todo es posible y yo busqué la perspectiva cinematográfica para tomar las imágenes como si hubiéramos colocado cámaras en los escenarios", explicó Snyder.


El 3-D tampoco consiguió cambiar la "perspectiva visual" de este realizador, quien relató que los técnicos, "en lugar de decir 'no puedes hacer eso'", le dieron "total libertad" y adaptaron el 3-D a las tomas que el director prefería.


Los paisajes de la isla de Tasmania sirvieron de inspiración para crear el entorno de los habitantes de Ga'Hoole y varios miembros del equipo viajaron a una reserva de pájaros en el Reino Unido para estudiar el comportamiento de diferentes especies de búhos y lechuzas.


El objetivo de Snyder era "que los animales parecieran de verdad y no dibujos", pero para lograr que el público "conectara" con los protagonistas, se ignoró el hecho de que las lechuzas no mueven los ojos "porque son capaces de girar la cabeza 180 grados" y, así, la expresión de Soren y sus amigos resultó "más humana".


Tras acabar este filme, en el que Snyder ha trabajado con el mismo equipo que realizó Happy Feet, el director de Watchmen está ultimando Sucker Punch.
La productora de La leyenda de los guardianes y mujer del director, Deborah Snyder, se mostró especialmente ilusionada con este proyecto.

"La historia original de Sucker Punch es de Zack, la película tiene un casting eminentemente femenino y relata la historia de una mujer, fuerte y a la vez sexy, ingresada en una institución mental que busca en su imaginación vías alternativas para escapar", comentó, por su parte, Deborah.

Superman: Man of Steel, una película sobre la que Snyder no quiso hablar demasiado, y Xerxes, la precuela de 300 en cuyo guión ya está trabajando junto a Frank Miller, son los próximos proyectos de este director al que no le importaría volver a trabajar en una película apta para sus hijos pequeños.

jueves, 21 de octubre de 2010

Duffy cambia el soul por la música disco en su nuevo álbum, "Endlessly"

La artista británica Duffy presentó hoy en Londres su nuevo álbum, Endlessly, en el que la cantante que saltó a la fama con temas como Mercy ha apostado por los ritmos propios de la música disco, en lugar de por el soul clásico que le llevó a la fama hace dos años en su primer trabajo de estudio.

Duffy cambia de fórmula, pero no renuncia a sus grandes sellos personales: su voz, una de las más peculiares del panorama musical actual, y el estilo Motown que consiguió que su primer disco, Rockeferry (2008), fuera uno de los más exitosos del año con más de 6,5 millones de copias vendidas en todo el mundo.

Well, well, well, el primer sencillo de un álbum que saldrá a la venta el próximo 29 de noviembre, fue el tema elegido por Aimee Anne Duffy para dar comienzo a un concierto de presentación que tuvo lugar en el teatral Café de París del centro de Londres, al que sólo tuvieron acceso periodistas y un selecto grupo de invitados.



Los ritmos funkies de Well, well, well continuaron con Keeping my baby, una canción que dio paso a un par de baladas, Endlessly y Too hurt to dance, para las que la cantante y compositora galesa contó con la colaboración de media docena de violinistas y violonchelistas.
"Este disco no es una vuelta al panorama musical porque nunca me he marchado", advirtió a los asistentes Duffy, que hacía dos años que no grababa un álbum de estudio.

Ataviada con una falda larga con una llamativa apertura central que dejaba entrever toda la longitud de sus piernas, impresionó con su imponente voz en directo, pero dejó claro que el baile no es uno de los fuertes de su puesta en escena.

Lovestruck y My boy fueron otras de las canciones interpretadas por Duffy que, para la preparación de Endlessly, ha contado con la ayuda del veterano compositor Albert Hammond, autor de emblemáticas canciones como When I need you.

Con los primeros acordes de Mercy, la artista de 26 años se desató y, micrófono en mano, pidió al público que coreara junto a ella el estribillo de una canción que consiguió que los asistentes se arrancaran a bailar.

Ganadora de un Grammy y de tres "Brits", los premios musicales más importantes del Reino Unido, Duffy es una de las voces más destacadas de la nueva generación de intérpretes femeninas que tienen como referencia a los clásicos de los años sesenta y a las artistas del sello Motown.

Considerada una de las grandes estrellas del soul británico junto a la polémica Amy Winehouse, la joven se dio a conocer en 2003 en la versión galesa de concurso de talentos Operación Triunfo.

domingo, 10 de octubre de 2010

El hotel Savoy de Londres inaugura una nueva era de lujo tras su reforma

Tras una gran reforma que ha costado tres años y 254 millones de euros (352 millones de dólares), el hotel Savoy de Londres reabre sus puertas el próximo domingo para inaugurar una nueva era de lujo sin renunciar a los estilos eduardiano y Art Decó que le dieron fama mundial.

El Savoy, primer hotel de lujo que se abrió en la capital británica, sorprendió a finales del siglo XIX por ser también el primer establecimiento hotelero de Londres con ascensores, electricidad y baños prácticamente en todas las habitaciones.

Famoso por alojar a estrellas del cine como Marilyn Monroe y Errol Flyn, en 2007 tuvo que echar el cierre por primera vez en sus 118 años de historia para iniciar un lavado de cara con una duración prevista de 17 meses y que al final se alargó más de tres años.

Con la subasta de más de 3.000 piezas de mobiliario del establecimiento, en la que se recaudaron 2,5 millones de euros (3,4 millones de dólares), el Savoy dio comienzo a una reforma destinada a devolver al hotel el lustre y el prestigio perdidos en las últimas décadas.

El arquitecto Pierre Yves Rochon ha sido el artífice del rediseño de los interiores del hotel, que cuenta en sus habitaciones con las últimas tecnologías, como espejos que se convierten en pantallas de televisión.

La remodelación del establecimiento que un día dirigiera César Ritz, el suizo fundador de la cadena de hoteles de lujo Ritz, ha costado más del doble de lo planificado -inicialmente, se calculó un presupuesto de 100 millones de libras (158,7 millones de dólares)-, y no ha estado exenta de contratiempos, tal y como ha reconocido el director general del Savoy, Kiaran MacDonald.

Cada día extra que el hotel ha permanecido cerrado, sus propietarios han dejado de ganar 500.000 libras (793.812 dólares) y en los tres años que han durado las obras, sólo 75 de los 650 de los empleados han permanecido fieles a la casa.

Sin embargo, MacDonald se muestra optimista y cree que la obra "superará las expectativas del público y hará que el Savoy recupere el lugar que le corresponde entre los grandes hoteles del mundo".

Para lograr tan ambicioso objetivo, más de un millar de artesanos y artistas han trabajado en la renovación de la decoración de un edificio en el que el estilo eduardiano, típicamente británico, comparte protagonismo con el Art Deco desde que en 1929 los directores del hotel se decantaran por esta corriente para las reparaciones tras la Primera Guerra Mundial.

Desde entonces, el imponente rótulo "Savoy" (Saboya) de acero inoxidable que corona la breve entrada de acceso al establecimiento -única vía del Reino Unido por la que los vehículos circulan por la derecha- se unió a la fachada de mármol y a la estatua de Pedro II, conde de Saboya, que construyó en ese mismo lugar su palacio, destruido en la revuelta de los campesinos en 1381.

El emblemático rótulo del hotel podrá volver a verse en todo su esplendor tras las obras. Savoy.

En los últimos meses de la reforma, un telón que promocionaba el musical "Una rubia muy legal" cubría la emblemática entrada del hotel, situado entre el Strand y el Támesis, una forma de conseguir fondos adicionales para un hotel sobre el que todavía corren rumores de una posible venta.

El hotel ha cambiado cuatro veces de manos en los últimos años y tendrá que competir en su reapertura con la inauguración de un Waldorf-Astoria al oeste de Londres y de un Four Seasons cerca de Hyde Park, para conseguir atraer clientes con tarifas que no bajan de las 350 libras (555 dólares) la noche.

A su favor cuenta con 268 habitaciones -94 Art Deco y 174 de estilo eduardiano-, una suite real que cuesta 10.000 libras (15.885 dólares) la noche a cambio de dormir en una cama que costó 25.000 libras (39.714 dólares), y una piscina en la azotea, una de las pocas de esas características en Londres.

Pero sin duda, la gran baza del Savoy es su historia. El impresionista francés Monet retrató la vista del Támesis que se puede disfrutar desde algunas de sus habitaciones, y Marilyn Monroe dio allí su primera rueda de prensa en el Reino Unido.

El político Winston Churchill fue uno de sus habituales comensales durante la Segunda Guerra Mundial, y los escritores George Bernard Shaw y HG Wells formaban parte de la clientela de su American Bar.

Nada puede igualar en leyenda a un establecimiento que en la fiesta de cumpleaños del rey Eduardo VII llenó de agua el patio central para que los comensales pudieran cenar en góndolas y sentirse en la mismísima Venecia.

sábado, 9 de octubre de 2010

Liverpool celebra los 70 años del nacimiento de un mito: John Lennon

John Lennon, quien fuera miembro de los legendarios The Beatles e inmortalizara canciones como Imagine, será objeto de un emotivo homenaje en Liverpool, la ciudad que le vio nacer un 9 de octubre de hace 70 años.

Un concierto benéfico, charlas a cargo de quienes conocieron al músico y una fiesta de cumpleaños en el emblemático Cavern Club son algunas de las actividades que ha organizado la ciudad natal del ex Beatle para celebrar tan señalada fecha.

El 9 de octubre de 1940, Liverpool veía nacer a uno de sus hijos más conocidos, John Winston (en honor a Winston Churchill) Lennon, el hombre que revolucionó la música de los años sesenta y setenta del siglo pasado con temas como Strawberry Fields Forever y que se convirtió en un mito cuando Mark David Chapman segó su vida al tirotearle en la puerta de su domicilio el 8 de diciembre de 1980.



En un año en que se celebran los 70 años del nacimiento de Lennon, tres décadas de su asesinato en Nueva York, medio siglo de la formación de los Beatles y 40 años desde la disolución de la banda, los homenajes se suceden y Liverpool apuesta por mostrar lo que sólo esta ciudad conoce: los orígenes de uno de los más grandes músicos pop del siglo XX.

Las celebraciones comienzan el sábado en el emblemático Cavern Club con una fiesta de cumpleaños para la que ya se han agotado las entradas. En ese lugar, entre 1961 y 1963, los Beatles ofrecieron alrededor de 300 conciertos en los que pulieron sus actuaciones en vivo, comenzaron a dar fama a canciones como She Loves You y conocieron a Brian Epstein, su manager.

Un mes antes de viajar a Estados Unidos por primera vez, en agosto de 1963, los Beatles dieron su último concierto en el legendario pub con la promesa de regresar algún día.

La fama les impidió volver a ese escenario, pero una escultura de un joven Lennon a la entrada del club recuerda que los Beatles nunca llegaron a marcharse del todo de Liverpool.

Antes de que Lennon se convirtiera en un Beatle, en 1957, inició sus estudios de bellas artes en la escuela de arte y diseño de la ciudad, la actual Universidad John Moores, que durante las próximas semanas acogerá una serie de exposiciones con obras del artista.

En este centro educativo se enterrará además una de las tres cápsulas del tiempo con grabaciones de Lennon, dibujos y algunos recuerdos, destinadas a preservar el legado del ex Beatle para las próximas generaciones o, al menos, hasta su apertura, prevista para 2040, en el centenario de su nacimiento.


En Liverpool nació también el primer hijo de Lennon, Julian, fruto del matrimonio del cantante con Cynthia Powell.
Quien inspirara canciones como Lucy in the Sky with Diamonds será uno de los protagonistas de este aniversario al inaugurar junto a su madre el monumento "Peace & Harmony".

Julian y Cynthia, de la que Lennon se separó en 1968 tras iniciar su romance con Yoko Ono, han organizado además la exposición "White Feather: The Spirit of John Lennon", con objetos que según el propio Julian "repasan la íntima y emotiva historia de la familia".

Los lugares que marcaron la infancia y adolescencia de Lennon, como el colegio en el que estudió y la casa en la que se crió junto a la hermana de su madre, Mimi Smith, que se hizo cargo del niño cuando éste tenía cinco años, podrán visitarse en los próximos dos meses.

Conferencias de familiares y amigos del ex Beatle, un festival de cine y un certamen de poesía completan el programa de actividades en honor de Lennon que concluirán con un concierto multitudinario.

Aún no se ha confirmado qué artistas participarán en el tributo musical que tendrá lugar en el Echo Arena de Liverpool, al que se espera que acudan más de 11.000 personas, pero los organizadores confían en que "Lennon Remembered" será "una noche emotiva e inolvidable" para los admiradores del ex Beatle.

El concierto tendrá lugar el próximo 9 de diciembre, fecha en que se cumplen 30 años y un día del fatídico tiroteo que acabó con la vida de Lennon cuando regresaba a su casa en el edificio Dakota de Nueva York tras hacer una entrevista para una emisora local.

El asesinato tuvo lugar tan sólo semanas después de que publicara el disco "Double Fantasy", que significó su regreso al panorama musical tras un paréntesis de cinco años para criar a su segundo hijo, Sean Ono Lennon.


El día en que murió, Lennon y Ono habían sido los protagonistas de una sesión de fotos a cargo de Annie Leibovitz, quien les retrató en una cama, con Lennon desnudo, en posición fetal y abrazado a Ono. El 22 de enero, la instantánea fue portada de la revista "Rolling Stone" y se convirtió en el emblema del final de una era y del comienzo de un mito.

sábado, 2 de octubre de 2010

Carlos Saura: "Hay un tipo de cine más intimista que ya no se puede hacer"

El cineasta español Carlos Saura, que visita estos días Londres para presentar en el Reino Unido Io, Don Giovanni, lamentó que en el panorama cinematográfico actual "ya no se pueden hacer películas intimistas, con un lado secreto" como las que caracterizan gran parte de su filmografía.

"El cine está regular, pero no solo en España, en todo el mundo. No falta gente con talento, buenos directores y guionistas, pero el problema está en la distribución", explicó Saura poco antes de presentar ante el público británico su visión de la ópera de Mozart Don Giovanni.

Según el director de cintas claves de la historia del cine español como Cría Cuervos (1975) y ¡Ay, Carmela! (1990), la digitalización y el fácil acceso a cámaras y material de grabación "permiten que cualquier joven con talento pueda hacer una magnífica película, pero es muy difícil dar salida a eso. El mercado está muy complicado".

La televisión, las series y los DVD's propician, según el cineasta, que la gente prefiera quedarse en casa en lugar de ir al cine, lo que lleva a que los productores "no den la oportunidad de hacer historias contadas desde una perspectiva más íntima, que igual funcionarían, pero que se niegan a hacer".

No le gusta volver a ver antiguos trabajos, pero por una de sus historias más íntimas, Elisa, vida mía (1997) haría una excepción. "Me encantaría poder hacer una segunda parte", confesó Saura, que ya volvió sobre esa película cuando en el año 2004 presentó una novela "para explicar qué había pasado con algunos de los personajes y dejar más claros algunos puntos de la historia".

Pese a todo, Saura se siente "muy afortunado" ya que, con más de 40 cintas a sus espaldas, siempre ha hecho "solo aquello que quería hacer".

"Hay trabajos muy penosos y hacer cine es un trabajo placentero", declaró el cineasta, que afirma que los rodajes nunca le han dado demasiados quebraderos de cabeza porque empezó a dirigir películas "en una época con muy pocos materiales, donde había que economizar y aprender a improvisar".

En los años de sus comienzos, cuando revolucionó el cine y retó a la censura con Los golfos (1959), las limitaciones técnicas marcaron su estilo de hacer y se acostumbró a rodar con pocos planos, algo que aún suele caracterizar sus películas.

La Transición hizo que el tono político y de crítica social de sus primeros trabajos fuera desapareciendo, "porque ya no hacía tanta falta hablar de ello", aunque Saura afirma que nunca quiso poner la política en el "primer plano" de sus obras, sino "más bien como una metáfora".

Para Saura, lo esencial al elegir tema a la hora de rodar es "hablar de lo que se conoce", por eso la música, otra de sus grandes pasiones junto al cine y la fotografía, acapara desde hace años parte de su filmografía.

El London Spanish Film Festival proyecta estos días Io, Don Giovanni, una cinta que tiene a la ópera como protagonista, y en unas semanas, Shanghái acogerá el estreno en China de Flamenco, flamenco, donde Saura ha vuelto a decantarse por el género musical.

"Me gusta la música, la ópera, porque no tiene nada que ver con el cine. Todo lo que me interesa, la fotografía, el dibujo, la escritura, es un camino hacia el cine. Por eso me gusta tanto la ópera, porque es algo completamente distinto", comentó.

Aunque tiene dos proyectos cinematográficos entre manos, Saura no quiere adelantar nada, "porque hoy en día nunca se sabe si van a salir las cosas", pero, al margen del cine, se muestra ilusionado por la preparación de una exposición con la luz como temática para el Centro Cultural Oscar Niemeyer de Avilés (Asturias, norte de España).